Abrir publicación

¡Me prefiero!

por LOLAPERLA

IMAGEN: "Eyaculación", pieza de videoperformance por LolaPerla, creada para el corto Laudetur Voluptatem Incarnata (alabado sea el placer de la carne), realizado por Alicia Sabina Fotografía: Alicia Sabina
IMAGEN:
«Eyaculación», pieza de videoperformance por LolaPerla, creada para el corto Laudetur Voluptatem Incarnata (alabado sea el placer de la carne), realizado por Alicia Sabina
Fotografía: Alicia Sabina

Le he escrito a mis labios que fueron rosados, seca mi mente

Mis labios deseaban frotarse con los de ellas, seca mi mente

Fría soledad mía, calor asfixiante, me reconozco egoísta.

Estuve contigo antes de verte

Me masturbé hasta mojar mis calzoncillos, imaginándote

Maldita glándula de Anarcha

Maldita me prefiero

Me prefiero.

Quito tu mano y pongo la mía

Me reconozco egoísta

Y a la vez, reconozco

Me hago, mucho muy mía.

A mis manos les pregunto

Por qué quieren ir a mi clítoris

Teniendo otras cerca

Le pregunto a mis piernas paralizadas

Le pregunto a mi clítoris, por qué resistirse al rose con la tuya

Y mi mente seca, me grita

quiero estar sola contigo.

Pero esta vez me quedé acalorada!

Disfrutaré crearte en imagen

para masturbarme conmigo.

[divider]

LOLAPERLA. Performer lesbofeminista Q-ir y Antropóloga Física.

Abrir publicación

¡Qué Vulvaridad! Exposición fotográfica

Por Colectiva Histeria

El pasado 22 de marzo, la Colectiva Histeria presentó el proyecto ¡QUÉ VULVARIDAD! Exposición fotográfica. Punto Gozadera fue sede de este encuentro de vulvas, más de 70 fotografías fueron expuestas durante un mes para recordarnos la diversidad y belleza de nuestras vulvas.

     El proyecto pretende fomentar el amor propio, la aceptación y comodidad con nuestra piel, derrocando el pensamiento de lo que debiera o no ser la belleza del cuerpo de la mujer y el desarrollo de nuestra sexualidad.

    Desvinculando todo estereotipo estructurado por la pornografía falocentrista y la publicidad sexista que ametralla nuestro día a día con imágenes que no sólo son una falacia, son además ofensivas para las que no cumplimos con los protocolos solicitados por los creadores de lo visual que contamina el ojo de la sociedad en que vivimos.

     El proyecto surge a partir de charlas entre dos histeriquitas de la colectiva, cuestionándose el por qué el rechazo de una de ellas a su vulva: pensaba que era fea por no cumplir con la estética de la “vulva perfecta” que tanto nos venden. Nos pusimos a investigar y descubrimos que hay mujeres que, odiando su vulva, la mutilan con cirugías estéticas para reducir el tamaño de sus labios. Esto nos impactó y, días después, la compañera comenzó a tomarse fotos y así pudo apreciar la belleza de su vulva, la perfección de la misma y pudo amarla. Entonces decidimos incitar a más poseedoras de vulvas a verlas, sentirlas, amarlas y sobretodo fotografiarlas.

    Para nosotras, la repuesta a la convocatoria, además de sorprendernos, nos hizo darnos cuenta de la necesidad que existe de tener espacios donde se hable de nuestra vulva y se vea nuestra cuerpa.

Ahora la convocatoria ¡Qué Vulvaridad! está dando la vuelta por algunos países de Centroamérica, en donde esperamos recibir gustosamente sus vulvas y exponerlas en Nicaragua y Costa Rica.

Abrir publicación

El arte feminista toma dos Museos de la Ciudad de México. Yoko Ono “Tierra de esperanza” / Mónica Mayer “Si tiene dudas…pregunte”

slide1

Por Benjamín J. M. Martínez Castañeda

“Si no me equivoco, el malestar que no tiene nombre que perturba las mentes de tantas mujeres de hoy en día no es una cuestión de pérdida de la feminidad ni de demasiados estudios ni de las exigencias de la vida doméstica. Es mucho más importante de lo que nadie reconoce. Es la clave de esos otros problemas nuevos y viejos que llevan años torturando a las mujeres y a sus maridos e hijos, y desconcertando a los médicos y a los responsables del mundo educativo. Bien pudieran ser la clave de nuestro futuro como nación y como cultura. No podemos seguir ignorando esa voz que resuena en el interior de las mujeres y que dice:

 <<Quiero algo más que mi marido, mis hijos y mi hogar.>>”

(Betty Friedan, La mística de la feminidad)

Si bien es cierto, no es la primera vez que se presenta una exposición retrospectiva de una mujer artista en algún Museo de la Ciudad de México; el Museo de Arte Moderno ha dedicado exposiciones a Frida Kahlo y Remedios Varo, el Palacio de Bellas Artes hizo lo propio con Olga Costa, Tamara de Lempicka y Louise Bourgeois, solo como ejemplos. Sin embargo, no se había hecho con artistas vivas, o al menos con un discurso feminista. ¿Casualidad o coincidencia? Dos feministas toman Museos de la Ciudad de México: Museo Memoria y Tolerancia (MMT) y Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC).

Yoko Ono “Tierra de esperanza”.

El dos de febrero de 2016 se inauguró en el MMT la exposición de Yoko Ono titulada: Tierra de esperanza; curada por Gunnar B. Kvaran, dicha exposición es una iniciativa de Proyecto Paradiso, el cual forma parte de la Comisión de Cultura Arzobispado de México. El texto de sala dice: “El arte de Yoko Ono transmite mensajes de paz inspiradores y revela un gran compromiso social, proponiendo piezas generadoras de caminos, tanto a nivel personal como comunitario, para trascender los conflictos y lanzar propuestas que conduzcan al bienestar de la humanidad.”[1] Tristemente Yoko Ono repite su discurso: no criticar al gobierno y hacer lo que se pueda. A partir de esto me pregunto si la visita de Yoko Ono a México es preludio de la visita del Papa o una estrategia más de nuestro gobierno de espectáculos.

Tal parece que se pueden responder ambas preguntas. En primer lugar, esta exposición consta de diecinueve piezas más la activación de espacios públicos como: la plaza de las tres culturas, el Zócalo capitalino, el Bosque de Chapultepec, la estación del metro Mixcoac, así como parabuses de la CDMX. Me resulta imposible no ver estas activaciones de espacios públicos como mero espectáculo que intenta hacer ver a Yoko Ono como el instrumento de unificación social; dice Guy Debord: “En tanto que parte de la sociedad, es expresamente el sector que concentra todas las miradas y toda la conciencia. Precisamente porque este sector está separado es el lugar de la mirada engañada y de la falsa conciencia; y la unificación que lleva a cabo no es sino lenguaje oficial de la separación generalizada.”[2]  Así pues, el espectáculo que envuelve esta exposición se genera a partir de la <<pornomiseria>>; es decir, en función de la manipulación y mediatización de las imágenes.

Ahora bien, es preludio a la visita del Papa, no por ella, sino por el discurso forzado que se empeñó en mostrar el Museo Memoria y Tolerancia al invitarnos a imaginar la paz; dice el press kit: “Exposición plástica de Yoko Ono, un movimiento por la paz en la Ciudad de México. La artista plástica invita a los mexicanos a actuar a favor del bien común, originando actos generosos y transmitiendo mensajes de optimismo.”[3] La obra de Yoko Ono ha sido reducida a mero espectáculo. Dice San Agustín: “Arrebatábanme los espectáculos teatrales, llenos de imágenes de miserias y de incentivos del fuego de mi pasión. Pero ¿qué será que el hombre quiera en ellos sentir dolor cuando contempla cosas tristes y trágicas que en modo alguno quisiera padecer? Con todo, quiere el espectador sentir dolor con ellas, y aun este dolor es su deleite.”[4] No es necesario que nos recuerden la violencia extrema que vivimos día a día, le recuerdo a la organización del MMT que los mexicanos vivimos secuestrados en nuestros hogares. El error no radica en la exposición misma, sino en el discurso; hacer de la pena y la culpa judeocristiana el eje rector de la muestra ha sido un gran fallo.

Mónica Mayer “Si tiene dudas…pregunte: una exposición retrocolectiva”.

Es sábado seis de febrero por la mañana y me dispongo a visitar el MUAC, se llevará a cabo algo nunca antes visto: la primera exposición de una artista feminista viva en un Museo latinoamericano; así lo hizo saber Cuauhtémoc Medina curador en jefe del Museo. Cuenta Liz Misterio que la primera vez que las artistas feministas mexicanas solicitaron un Museo, se les asignó el estacionamiento del Palacio de Bellas Artes. Hoy es una realidad, el MUAC alberga la exposición Si tiene…dudas pregunte: una exposición retroclectiva de Mónica Mayer y curada por su compañera y amiga Karen Cordero. “(…) Mónica Mayer es una de las artistas que se insertan en las ‘formas insubordinadas del arte mexicano’, forma parte de quienes han abandonado al enriquecimiento de la escena artística (…) Sus aportes y agenciamientos no se limitan a sus piezas objetuales; también se proyectan en las discusiones y críticas desde la columna que sostuvo durante varios años e un diario de circulación nacional (…)”[5] Esta exposición nos invita a pensar la mística de la feminidad, e ir más allá: hacer de lo personal lo político.

La exposición de Mayer, así como el arte feminista, se aborda desde la intimidad de la experiencia, dice Julia Antivilo al respecto: “debemos ver la importancia del contarse, del hablarse en primera persona, que se expresa como una narrativa empoderada. En ese narrar la experiencia, la autobiografía como tópico muy recurrente en la obra de las artistas feministas, es un lugar de encuentro (…).”[6] Sin embargo, el giro curatorial y museológico  propuesto por Karen Cordero implica abrir al público el proceso narrativos de la exposición, de aquí sale el concepto “retroclectiva”, pues se proponen integrar el trabajo individual, colectivo, público y privado de Mónica Mayer.

Dentro de esta exposición que parte de los años setenta del siglo pasado, encontramos producciones de arte urbano, público, obra bidimensional, tridimensional y conceptual; además de que parte de las piezas revivirán a partir de activar el espacio Museo. En este sentido la exposición: “(…) apuesta a una muestra abierta, que se activa por medio de la participación intelectual reflexiva y crítica, pero también corporal-física, afectiva, de las personas que la visitan.”[7] Como resultado se obtiene una conciencia estética y política del sujeto. La gran diferencia entre la exposición de Yoko Ono y Mónica Mayer, es que la de Mayer busca transformar el cuerpo de la mujer en un cuerpo político que cuestione las políticas de representación de los cuerpos e identidades marginadas. [8]

La exposición de Yoko Ono “Tierra de esperanza” puede visitarse en el Museo Memoria y Tolerancia hasta el 29 de mayo. Mientras que la exposición de Mónica Mayer “Si tiene dudas…pregunte: una exposición retroclectiva” puede visitarse en el Museo Universitario Arte Contemporáneo hasta el 31 de julio.

[divider]

[1] Texto de sala.

[2] Guy Debord, La sociedad del espectáculo. § 3.

[3] Press kit.

[4] San Agustín, Las Confesiones. (Libro III. Capítulo 2)

[5] Sol Henaro, “Retroclectiva de una imparable: Mónica Mayer”, en Mónica Mayer, Si tiene dudas…pregunte: una exposición retroclectiva, México: MUAC. UNAM, pp. 12-13.

[6] Julia Antivilo Peña, Entre lo sagrado y lo profano se tejen rebeldías. Arte feminista latinoamericano, p. 191.

[7] Karen Cordero, “Si tiene dudas…pregunte: la propuesta artística de Mónica Mayer”, en M. Mayer, Op. Cit., p. 24.

[8] Cfr. Julia Antivilo Peña, Op. Cit.

[divider]

Benjamín Martínez Castañeda. Productor visual mexicano, su investigación está encausada a la teoría queer y filosofía política.benja

 http://benjamin-walpurgis.tumblr.com/
http://bjmmcteoriafotografia.blogspot.mx/
http://benjaminmartinezmvaf.blogspot.mx/

Navegación de entradas

1 2 3
Volver arriba