Con esta gota
de semen
cayendo
sobre mi lengua
te pensé
y floreció en mi boca
extrañarte
me has amamantado
putito lindo
has sido mi desmadre
poeta bendito
mordida y sangrecita
para dar carmín a los labios
contradicción y acción
sobre taquito doblado
culito roto
lavando vereda
trancurrir
como trascurren
las libélulas
cantar bajo la lluvia dorada
sirena frente al mar
pensando en volver
a casa
destilado fino
de leche amarga
crocante mentón
culeada aparición
en mantos pulguientos
pañoleta de turbante
marinera de todas las guerras
guarra bella
y torerito
teterona
y vieja bruja
señorita
grito pardo
a la cordillera
puño rojo
manifiesta
y desdentada
alas rotas
bien cortadas
a cuchillo
raspón suave
liberando gruñidos
petiso pijudo
culón
y algo bestia
me has amamantado
y has sido mi desmadre
en cada acabada
a puño limpio
cada pantalón
ajustado
por atrás
por adelante
por todos
los costados
en los besos al aire
tetas al viento
conchas peludas
pluma que se cae
y vuela
desde tus alas
a mi pecho
que relleno
con tu perdida
en mis chiqueros
en mis agujeros
los de las muelas
los de todo el cuerpo
en cada pelo
en cada basurita
en limpiarse la acabada
con la remera
en ponerse una pollera
en tragar
como tragan las perras
en esta gota
donde brota
la extrañeza
de extrañarte
como se extraña
cuando se piensa
que se está
lejos
en cada una
de estas letras
salud.
[divider]
Patricio Ruiz. Director, dramaturgo, actor y poeta argentino. Ha dirigido en Uruguay, Argentina y México, siendo Potencialmente Haydée y Ceremonia sin flores, sus dramaturgias y direcciones más significativas. Entre sus libros de poesía y cuentos están Tyndall de relatos breves y el poemario Algo que crece.
No es un secreto que Almendra Castillo, mejor conocida en estos rumbos como Rurru Mipanochia es una artista consentida de Hysteria! Revista, que ha engalanado ya en varias ocasiones esta humilde publicación con sus fantásticos dibujos en los que explora las relaciones entre los cuerpos y las prácticas sexuales socialmente considerados como abyectos y la mitología precolombina con un rico imaginario lleno de fantasía y colorido, pero en esta ocasión nos interesa mostrar otra de sus facetas: la de realizadora de videos en los que inventa maneras divertidas e imaginativas de usar su sangre menstrual como arma para sacudir tabús sobre el cuerpo y divertirse en el proceso.
En marzo de este año Rurru lanzó a las redes sociales un video como muchos otros que se pueden encontrar en Youtube en el que la artista comparte sus tips de maquillaje con el mundo, algo que podría haber pasado totalmente desapercibido de no ser por que con lo que Rurru colorea su cara es su propia sangre menstrual a la vez que va narrando sobre las propiedades que puede tener el líquido vital al contacto con la piel.
Este video causó conmoción en internet, al ser leído como una practica insalubre y grotesca, causando mucho desconcierto entre los internautas que veían su mirada atrapada por la candidez de Rurru y sus actos escandalosos, por lo que al cabo de pocas horas el video se volvió viral, casi siempre acompañado de comentarios que revelaban el profundo asco e ignorancia que rodean a la menstruación.
Rurru no tiene miedo de experimentar con los fluidos de su cuerpo ni de compartir todo lo que ha investigado sobre el tema con quien la quiera escuchar y con ello poner en tensión las convenciones sociales que marcan a la menstruación como algo sucio y digno de ser escondido a toda costa, en un mundo en el que la sangre que sale de los cuerpos por causas violentas inunda todos los medios de comunicación sin que esto sea causa de mayor escándalo. Resulta paradójico que el hacer visible esta sangre, producto de un proceso corporal completamente cotidiano e inofensivo, cause reacciones tan violentas.
A continuación les compartimos una entrevista que Rurru respondió para Hysteria! Revista.
Liz Misterio: ¿Quién es ese ser que se hace llamar Rurru Mipanochia??
Rurru Mipanochia: Es un personaje de ficción, un tipo alter ego que me he creado, es como una de mis tantas personalidades, un personaje que se atreve a hacer cosas que Almendra no hubiera hecho antes… aunque con el tiempo Rurru y Almendra se han entremezclado, coexisten a la perfección.
LM: ¡¡En Hysteria somos fans de tus dibujos, creemos que eres genial!! Nos pareció super chistoso y extraño que te pusieras a hacer videos para youtube en los que usas la sangre menstrual como producto de belleza, ¿de donde surge esta idea y como te gustaría que la gente reaccionara a ellos?
RM: Pues comencé a experimentar con la menstruación desde que adquirí mi copita menstrual, siempre he sido muy curiosx y la verdad es que comencé a jugar con mi sangre desde la primera vez que usé la copa, a olerla, tocarla, probarla y ese tipo de cosas, pues pese a que quizás aún tengo muchos tabúes en mi cabeza, intento terminar con la mayoría de ellos paulatinamente, algo así como que mi propósito personal es eliminar cuantos tabués invadan aún mi mente. Luego la idea de los videos surge (como todo lo que hago) por ociosx. Una tarde completa me la pasé viendo tutoriales de maquillaje, la verdad es que nunca antes me había sentado a ver ninguno, había escuchado sobre Vloggers (Sólo conocía a la Darks y la Galatzia) y esas cosas, pero la neta es que no sabía de ese mundito. Entonces fue que aparecieron como sugerencia en la página de inicio de Youtube y comencé a ver uno tras otro, moría de risa entre uno y otro, leí algunos comentarios… me asombré de la credulidad de las personas, de tanta superficialidad, digo, a cada quien su santo… y claro, como en el caso de cualquier mass media donde circula información que la mayoría de la gente se cree muchas veces. Luego vi un video genial, una chica que se llama Yasuri, la amé, primero porque obvio se ve que todo lo que hace es cábula, es broma, me reí mucho, era muy chistosa, pero me asombré como al leer los comentarios hahaha, la gente la insultaba, le decía que era una naca, una gata y no se qué tantas cosas más. Lo presentía, algunas personas carecen de sentido del humor, no tienen sentido común, y no saben diferenciar lo que es sarcasmo. Me da mucha risa que las personas se tomen todo tan a pecho hahaha. Fue en ese momento que se me ocurrió hacer una serie de tutoriales empleando mi menstruación. Se me hace tan absurdo que la menstruación siga considerándose como algo malo, sucio… obvio si tienes infecciones vaginales hay problema, pero si te checas constantemente y estás sanx, no es posible que te puedas “contagiar de algo”, y de alguna u otra forma pones a algunas personas a investigar, y no a quedarse como siempre tragándose todo lo que les dicen los medios. Además tenía curiosidad de cómo reaccionaría la gente ante el uso de este fluido, pues es chistoso como la manipulación mental patriarcal llega a su máximo apogeo también dentro de este issue. Semen, corrida en el rostro o cualquier parte del cuerpo es visto por la mayoría como algo rico, excitante, sin asco. Me asombró bastante de igual forma cómo el uso de este simple fluido puso a las personas tan agresivas, y lo que más me asombró fue que la mayoría de esta gente eran “mujeres”, esto deja mucho que reflexionar… también por que la intolerancia social, está cabrona, es muy fuerte como entre nosotros seguimos reprimiéndonos unos a otros.
LM: ¿Te imaginabas que se iban a viralizar tanto estos videos? ¿Cuáles han sido las mejores y las peores reacciones que has recibido?
RM: No, la verdad es que nunca me imaginé que se fueran a viralizar , pues la peores reacciones, muchas, hahaha, muchos insultos muy chistosos, como que estaba enferma mental, que era una pendeja, que me mataran para no dejar crías, hahahahaha; y pues lo mejor creo que pasó durante (y que tampoco me imaginé) fue que recibí unos 200 mensajes vía facebook, de personas diciéndome que me apoyaban, gente que captó la broma.
LM: ¿Crees que estos videos que estas haciendo, complementan de alguna manera tu labor artística? ¿O los consideras un proyecto aparte?
RM: No, para nada aparte, creo que la complementan a la perfección, principalmente porque tengo en mente varios proyectos con fluidos y desechos corporales, para videos más elaborados. De hecho he invitado gente totalmente desconocida a formar parte de estos proyectos vía facebook y he tenido buenas respuestas. Está bonito que pese a saber que se manejarán fluidos para éste tipo de videos existan personas que se han ofrecido a formar parte de ellos.
LM: ¿Por qué crees que la sangre menstrual es un tabú tan grande en nuestra sociedad?
RM: El tabú ha crecido tanto desde antaño y se ha difundido entre todas las civilizaciones desde tiempos muy remotos, con la biblia que te dice que no puedes tocar ninguna mujer que esté en su periodo porque quedarás impuro, con las civilizaciones mesoamericanas; que prohibían que las mujeres menstruantes fuesen partícipes de rituales, ya que se pensaban contaminarían las ceremonias, así para prepararse para los rituales, los hombres debían evitar tanto el contacto sexual como visual con las menstruadoras. Al categorizar diferentes aspectos de la sexualidad femenina como malos, contaminantes e impuros, se establece una relación de desigualdad por medio del conjunto de normas, prácticas y símbolos que se le han adjudicado, lo que deja a las “mujeres” fuera de ciertos ámbitos de acción en comparación con los “hombres” y por ende en un status subordinado.
LM: Se que has investigado mucho sobre mitos relativos a la menstruación y a la sexualidad femenina, ¿te gustaría compartir alguno con nosotrxs?
RM: Les comparto mi favorito porque en verdad lo amo, y es que se dice que Quetzalcóatl estaba lavándose el pene, cuando echó de si el semen que cayó en una piedra. Así nació el murciélago que enviaron los dioses a que mordiese a Xochiquetzal y le arrancase de un bocado un pedacito de vulva, el cual llevó al inframundo y Mictlantecuhtli lo convirtío en flores, y a ese suceso le adjudicaban el fenómeno de la menstruación de las mujeres.
Nosotras decimos ¡Hurra por la exploración lúdica de los cuerpos!
***Al momento de publicar este artículo nos enteramos que el video «Gargaras de menstruación» fue censurado por Youtube.
Con Salvador Tornero y Panocha Chichimeka
Registro: Ivonne González
Espacio Cultural: La Comunitaria
Monterrey N.L 2015
Un cuerpo que se desplaza más allá de los confines de su propio cuerpo
Aquella materia que se desparrama y desborda
Extremidad trotamundos son nuestras heces
Deyecciones desciende/Deciden ser bálsamo para el pavimento.
Orines para cerrar pactos
Feminidades podridas/Carmesí intenso es la alfombra de óvulo
Sangre venérea para contagiar violencias
El llanto vaciado en el mingitorio de cualquier esquina,
Aire licuado en vómitos y lágrimas y sangres y sudores que se nos escapan a la vista
Pero están.
Mucosidad de un cuerpo que secreta/que secreto
La voluntad de secretar-La voluntad de no secretar
de replegar los fluidos
Sangrar por el lado interno del cuerpo a causa de la sequedad.
Lubricidad que da masaje a un cuerpo en orgía
Recuerdo de la profunda herida es el juego sexual
La frustración del dolor a causa de los deseos insatisfechos, del desengaño, de situaciones trágicas y de completas catástrofes…( ) …El carácter desgraciado es ajeno al sentido íntimo del acto sexual…( ) …pero remite a la profundidad de donde ocurre.
[divider]
Panocha Vengativa. Buscadora de problemas en su propio cuerpo, en su psique y en su entorno ( a veces sale chillando y con la patita lastimada).
Gusta de usar mojones por misíles
Gritar con heces y escupitajos en mano.,
Cuerpo que vomita y contagia la enfermedad y el asco hacia los mundos de muerte extremidades que se
propagan y protegen con sus orines y sus heces, con su menstruo y su saliva sangranre, flema corrosiva
que desintegra los miedos al mal morir.
Link de panocha vengativa: http://panocha-chichimeka.tumblr.com/
Archivos desclosetados: espectros y poderes disidentes –una exposición sobre archivo que sucede en el marco del 28 Festival Internacional por la Diversidad Sexual– es una visita al archivo de la memoria que va más allá del movimiento LGBTTTI, que habla de las diversidades, de la historia de lucha y de la visibilidad y la invisibilidad que tienen las sexualidades disidentes en México. No es una exposición fácil de visitar o digerir, contiene mucha información que hay que ver con una gran calma, poco a poco, paso a paso. Como en toda exposición en donde hay una curaduría, hay una selección de temas, objetos y memorias. Se pueden encontrar en ella documentos como banderas, fotos, volantes, carteles, postales, folletos, dildos, condones, arnés bdsm y fanzines.
La exposición tiene sus aciertos y sus desaciertos. Me parece que es un buen ensayo sobre la diversidad sexual en nuestro país, la lucha de la disidencia y momentos importantes que han cambiado nuestra visión de ella. Tiene como desacierto la falta de un análisis posterior de los archivos. Ahí están los archivos… ¿y después? Observación realizada por el crítico de arte Daniel Montero el día de la inauguración. Pero es una muy buena experiencia para pensar en el después, ¿qué hacemos con esta información? Dice el texto curatorial: “[…] este mapeo trata de interactuar con las inconsistencias, contradicciones, diferencias inasimilables, resistencias, ausencias y deseos para mostrar las complejidades de prácticas sexo-políticas entre épocas y generaciones.”[i] Entonces pensemos en la exposición como un mapeo, una búsqueda de las diferencias y las contradicciones. Un lugar en el que nos podemos parar para pensar en lo que está en ese análisis de las curadoras, y en lo que no está.
Lo que cada uno de nosotros pudo haber buscado con un franco deseo, es que las curadoras vean lo que uno ve. Esa es una memoria individual y un archivo personal, que es sumamente valioso y que sería importante rescatar de alguna forma en la exposición. Pero este archivo no tiene la obligación de estar presente. Hacer una curaduría implica poner ante los demás una forma de ver las cosas, no se trata de repetir ideas y formas, se trata de mostrar otras ideas y otras formas. Dice Philippe Parreno al hablar de qué es hacer una curaduría, que:
Los seres humanos quieren simplificar los acontecimientos en el mundo con el fin de comprenderlos. Por ejemplo, es más fácil de decir que la fuerza de gravedad es estable, pero en realidad no lo es. Oscila. Lyotard creía que el arte hablaba de eso, sobre las fuerzas resistentes que hacen que las cosas no sean totalmente lo que creemos que son. Esa es una forma muy hermosa de definir el arte y la curaduría de arte.[ii]
Archivos desclosetados: espectros y poderes disidentes nos habla desde una experiencia sobre la sexualidad disidente. Las curadoras y el equipo de investigación buscaron mostrarnos un punto de vista sobre las sexualidades. Nos hacen esta pregunta: “¿Cómo fue que llegamos a hacer vivibles, pensables y deseables las subjetividades contemporáneas disponibles en ese terreno ambiguo que llamamos diversidad sexual?”[iii]Una pregunta que nos habla justo del problema que plantea la exposición, la ambigüedad de la idea de diversidad sexual, los encuentros y desencuentros que se dan detrás de ella. Por lo mismo, es muy complicado que una curaduría de esta idea no deje afuera archivos, conceptos e impresiones. De la misma forma, cuando uno se enfrenta a esta exposición puede pensar en los problemas que se suscitaron al hacerla, las ganas de poner a todos, la imposibilidad de hacerlo.
Me imagino que ciertas luchas gremiales, sexuales y de poder, se infiltraron en el trabajo. Me imagino los archivos que no se prestaron, los que no se pudieron ver. También me imagino los que se sacaron porque no tenían un espacio en el discurso. Porque esta exposición fue un giro de 180 grados para el Museo Universitario del Chopo y el Festival Internacional por la Diversidad Sexual (FIDS). Un cambio en cuanto al concepto curatorial y artístico que hizo de esta experiencia un punto de partida para lograr nuevas formas de ver y pensar las sexualidades en este país, que son, desde mi punto de vista, totalmente necesarias. Es necesario polemizar y provocar diálogos acerca de qué es la sexualidad disidente en este país, ¿qué somos los cuerpos y los géneros que vivimos en él? ¿Cómo se nos reprime, cómo somos capaces de cuestionar a la sociedad? ¿Quiénes tenemos derecho a hablar de la sexualidad disidente? ¿Es solamente el punto de vista gay importante, es solamente esa la disidencia, o esa ya no es la disidencia?
Me parece que es entonces cuando debemos ponernos serios, hablar de cómo en un país como México las sexualidades y los cuerpos son reprimidos y entrenados para no ser, para obedecer y olvidarse de la posibilidad de ser otra cosa. El establishment sabe cómo absorber al disidente para neutralizarlo, por eso es que es siempre un escándalo cuando la disidencia habla desde otro lugar. Porque mueve las ideas y hace ver a quien ha sido neutralizado que ya no es la disidencia. Por eso es importante tener la capacidad de escuchar otros discursos, otras formas de pensar, de cuestionarnos qué estamos haciendo. Me parece que el Museo del Chopo ha dado ese paso y me parece importante, aún con sus limitaciones, escuchar lo que nos dice esta exposición y sus preguntas, ya que una de las cosas que me parece más significativa de ella es que nos deja muchas preguntas abiertas, que cada quien tiene la libertad de pensarlas, responderlas o de no hacerlo.
Yo nunca antes le había prestado atención a mi menstruación y cuando digo nunca eso es exactamente lo que quiero decir: nunca. Le hice tan nulo caso que la primera vez que me vino a los 9 años le dije a mi mamá: ya sangré; después subí a encerrarme a mi cuarto de juegos. Cuando, a las horas de haber dado mi comunicado, bajé por agua a la cocina, mi mamá me detuvo a mitad de la escalera que ya ascendía para seguir con la música a todo volumen y con mi baile, y me dijo: ¿te sientes bien? ¿no te duele nada? Con toda tranquilidad respondí que todo estaba bien y regresé a mi mundo.
Tenerme a mi como hija no ha ser cosa fácil, estoy muy segura de ello, si yo misma no me entiendo, no entiendo de dónde provine; si para mí escapa a mi propia comprensión cómo es que yo terminé siendo yo; ¿cómo no ha de resultarle extraño a esa mujer preguntarse cómo es que de ella pude salir yo?
La maternidad a mi criterio se le presenta como una cosa escalofriante, digna de ser temida y, por mero reconocimiento a su temeridad, es la única institución social a la cual mi sentido de respeto se niega a penetrar. Por eso cuando vislumbré la posibilidad de ser madre, me paralice por el ataque de angustia y pánico que me inundo de solo pensarlo.
Soy una mujer de 24 años que por primera vez en su vida temió estar embarazada. El temor fue tan grande que por un momento, presa de la contrariedad, me juré a mi misma que sería la última vez que me encontraría en tal situación. Antes incluso de que la tranquilidad mental me llegara junto a la descarga de un torrente sanguíneo que anunciaba que ninguno de mis óvulos había sido fecundado, sabía que no iba a cumplir esa promesa. Me gustan los hombres, me gustó saber y sentir un pene dentro de mí. Los penes entran más dentro que los dedos de una mujer, incluso los dedos de los hombres entran más dentro de mí que los dedos de una mujer. Eso no quiere decir que me hayan dejado de gustar las mujeres, pues todavía no encuentro un placer que sustituya – ni creo nunca encontrarlo – la belleza que provoca la imagen de dos pechos desnudos, redondos y firmes.
Creo que precisamente eso es la bisexualidad, la oportunidad de poder experimentar gusto, placer y satisfacción por el cuerpo del otro, sin importar si éste es el sinónimo o el antónimo del tuyo. Un cuerpo es un cuerpo y cuando se le ve con detenimiento es imposible no sentir algún grado de excitación por él.
Mi bisexualidad fue descubierta hace poco más de un mes cuando me acosté por primera vez con un hombre. Aquí habría que hacer una separación entre la esencia y la existencia de mi bisexualidad. La existencia se remonta temporalmente a un mes, pero la esencia podría precederla. La duda que me hace escribir “podría” es fácilmente revocable si la respuesta a estas preguntas es sí: ¿cuenta como bisexualidad a ver visto repetidamente porno hetero para masturbarme? ¿haber leído compulsiva – y casi al grado de enamorarme de una de las autoras-, crónicas de cómo era la relación entre una mujer y un hombre? En verdad no sé si la respuesta afirmativa a estas preguntas termine de saldar la duda sobre mi bisexualidad, lo que si sé es lo siguiente:
Si mi mente se había preparado para el lesbianismo por la experimentación con el cuerpo de una mujer; mi mente se había preparado para el cuerpo de un hombre por medio del arte y la literatura. Quizás por eso no hubo planes previos, dudas o la confesión de mi virginidad cuando él me propuso ir al otro cuarto a acabar lo que habíamos empezado en el sofá. Me tiró al suelo, me levantó las piernas y entro en mí. En una noche de dos botellas de whisky y proposiciones indecorosas dichas mutuamente en conversaciones triviales, tratando de ver si entre todas las personas que éramos esa noche, nos encontrábamos solos al final. Y lo hicimos. Me lo hizo. Se lo hice.
Fue cosa de una sola noche, fue uno más a mi lista con la diferencia de que su cuerpo era de un sexo distinto de quien lo precedía en mi historial. Él se vino afuera de mí, a los días sangré y pensé que todo estaba bien, hasta que al mes siguiente experimenté un retraso de 3 días, cuando la sangre debió bajar no bajo y yo me espanté. Las probabilidades eran pocas pero existían y yo tenía 24 años, no era una adolescente que no supiera lo que estaba haciendo, no, era peor que eso: era una adulta que había entrado a un mundo desconocido, en el cual efectivamente no tenía ni la más remota idea de lo que estaba haciendo. Lo que las mujeres aprenden a saber desde adolescentes, yo recién lo estaba descubriendo. Lo que mi alumna de 13 años que dejó de asistir a la escuela entendió al ver cómo su panza comenzaba a crecer y su sangre a escasear, yo no lo entendía, no lo entiendo y -a juzgar por lo que me dije a mí misma enfrente del espejo mientras ponía una mano en mi vientre: “por favor, no estés ahí, porque yo no puedo ser tu madre”- jamás entenderé cómo es posible que ante el hecho de saber que dentro de 9 meses darás vida no te acobardes y huyas.
Cuando me asumía lesbiana, sabía en teoría que la mejor de las opciones ante el escenario de una maternidad prematura y no deseada, era el aborto. Pero ahora, en la práctica, con la latente posibilidad de estar engendrando vida golpeando mi tranquilidad mental, ya no estaba tan segura. El acto me parecía digno de una sangrienta barbarie, pensar en mí, abierta de piernas ante la mirada de un médico que examina primero y después expulsa me era insoportable. Emocionalmente incapaz de enfrentarme ante eso sólo me quedaba la otra opción: proseguir con el embarazo. El problema era lo que venía inmediatamente después de mi nuevamente abierta de piernas expulsando a una criatura indefensa, chillona, incapaz de hacer nada por sí misma, esperando impacientemente todos los cuidados que se necesitan para crecer con una psique preferentemente no muy dañada.
La RAE define la palabra “estabilidad” como “cualidad de estable”, lo que quiere decir que aquello que tiene estabilidad es -cito textual- “lo que se mantiene sin peligro de cambiar, caer o desaparecer”. Traducido a los términos de mi vida, para acabar pronto, todo lo que yo no soy. De estar embarazada, el día de la concepción tenía en mi organismo una cantidad ridícula de alcohol, que según el más mínimo sentido común me descalificaba para llevar acabo de manera óptima la más ridícula de las tareas (que no fuera, obviamente, la de dejar que me abrieran y me alzaran las piernas). De estar embarazada, durante el primer mes de gestación había consumido no sé cuántas cajas de cigarros – pero la cantidad equivale a poder decir tranquilamente “muchas” – y 100 pesos de mota. Me daban el premio a la madre del año, sin duda.
“Por favor, no estés ahí, no puedes estar ahí”, repetía sin cesar frente al espejo, frente a la computadora, en el baño y mientras miraba al techo a punto de comenzar a intentar dormirme. No podía concentrarme en ninguna otra cosa que no fuera que la sangre que me daría tranquilidad no bajaba. “No estés ahí” es lo que decía, ¿a quién le estaba hablando? ¿No es hablarle a alguien y decirle “no estés ahí” una forma de aceptar que de hecho sí esta ahí? ¿Hay alguien ahí? Por favor, no estés ahí.
Y, entonces, la sangre, la bendita sangre llegó. Llegó justo cuando la paranoia ya estaba ganando la guerra que se libraba en mi mente, cuando estaba a tres segundos de descender a la locura, cuando la imaginación desmedida sobre que ninguna de las opciones que tomara sería la correcta, la adecuada o la más sensata estaba apoderándose de mi. Estaba ya en el momento clave de pensar que la poca sangre que había desprendido a los días de haber mantenido relaciones, era lo que se conoce como sangrado de implantación. El 30% de las mujeres embarazadas durante su primer mes sangran en pequeñas cantidades, es un sangrado rosado o café marrón que anuncia que adentro de su cuerpo se está desarrollando ya otro cuerpo. Creí con una firmeza inaudita en mí pertenecer a ese 30%; a ese nivel me encontraba.
El primer día que la sangre llegó, llegó poca. Pero al siguiente día inundó todo, traspasó todas las barreras hasta llegar a la superficie para anunciarme: “tranquila, los óvulos tardaron en desprenderse, pero aquí estoy. Aquí estoy y hasta ahora siempre he estado aquí”.
Recuerdo hace tiempo un día en el supermercado, tenía 10 u 11 años. Mi mamá me comentaba por una razón justificada, que ahora no recuerdo, que en los países del Oriente Medio debido a mi edad y al hecho de que comencé a sangrar tan joven, hombres mayores que yo ya me encontrarían atractiva e irían con ella a proponerle una transición sentimental y monetaria – yo a cambio de tantas cabezas de ganado – y ella tendría que sentirse orgullosa. A eso añadan que mis caderas son anchas, símbolo inequívoco para una cultura machista que soy una mujer fértil capaz de procrear buenos hijos varones que continúen la estirpe de su padre.
Mi sangre, entonces, me pasó completamente desapercibida hasta este momento. Este momento donde me doy cuenta de todas sus implicaciones y la agradezco y le temo a partes iguales con la misma intensidad.
Dirigido, producido e interpretado por Isabella Rossellini, Green porno es un catálogo de videos educativos sobre las características genito-genéticas, anatómicas; así como las conductas sexuales de algunos animales como los moluscos, roedores, arácnidos, insectos terrestres y voladores, mamíferos, aves…
En esta serie de trabajos sugestivos y extraños se confirma la necesidad humana de conocer los mundos secretos de los animales, quedando patente en la frase expresada por esta artista: “Los animales me distraen”, y que concede a éstos la importancia que merecen.
Quisimos incluir esta breve reseña en nuestra publicación sobre el tema de FLUIDOS presentándoles el video sobre el caracol. Pero todos son altamente recomendables.
Visiten el canal de Isabella y exploren la vida reproductiva de las mantis religiosas, las lombrices, los delfines, las marmotas o las chinches.
*
Ficha técnica:
Directed by Jody Shapiro / Isabella Rossellini
Written by Isabella Rossellini
Produced by Rick Gilbert / Jody Shapiro / Isabella Rossellini
Production Desing & Original Music – Costume Desing Andy Byers
Produced in Association with SUNDANCE CHANNEL 2008
**Como dato adjunto**
La serie de videos de Green Porno se publican en el SUNDANCE Channel, que es una cadena hermanada del Festival de cine independiente SUNDANCE, dirigido por Robert Redford, quien sugiriera a Rossellini hacer una serie de trabajos sobre animales, debido al gusto que ella siempre ha manifestado sobre el tema.
Para más info: http://www.elmundo.es/madrid/2015/06/04/5570744546163fad688b4582.html
¡Una experiencia encantadora que transformará lo que sabemos sobre nuestros compañeros planetarios!
La violencia hacia las mujeres, la indiferencia e incompetencia de las autoridades y la falta de solidaridad entre los seres humanos son algo de lo que no nos libramos en ningún sector de la sociedad, incluyendo el medio cultural.
En fechas recientes se ha desatado una fuerte polémica por la carta que le dirigió Tania Puente a la artista Lorena Wolffer en la revista digital Trama, el pasado 11 de julio, en la que denuncia haber sufrido una agresión sexual en el Museo de Arte Moderno (MAM), donde laboraba, por parte de un compañero de trabajo sindicalizado de la misma institución. El texto también resalta que a los pocos días del incidente la despidieron del MAM y reclama que recibió un trato negligente por parte de sus autoridades.
Por otro lado, Puente cuestionaba que en el museo se presentara la muestra Expuestas: registros públicos de Wolffer, que aborda el tema de la violencia hacia las mujeres, haciendo parecer que es un tema que le importa a la institución, cuando su caso concreto demuestra lo contrario.
Nos extraña la aparente insensibilidad que el Museo de Arte Moderno y el INBA han mostrado en el manejo de este caso. Esto, aunado al silencio que han mantenido, muestra una enorme falta de compromiso con la integridad de las mujeres que trabajan en la institución. Nos preocupa su seguridad. Demandamos que revisen el trato que le dieron a Tania Puente, que implementen un programa de capacitación en contra de la violencia de género para sus empleados y que establezcan protocolos internos de denuncia eficientes. Así mismo, exigimos un pronunciamiento público en contra de la violencia hacia las mujeres a la altura de las circunstancias.
Por otro lado, estamos muy consternadas por la violencia que se ha desatado por un lado en contra de Tania Puente y por el otro en contra de Lorena Wolffer, desviando atención del problema de fondo: la violencia de género, y la necesidad imperativa de generar mecanismos sociales e institucionales para combatirla y para promover modos de interacción que favorezcan el respeto.
Subrayamos la importancia de que las valientes voces de las mujeres que compartieron sus historias de violencia con Wolffer y que vemos en su valiosa exposición sean escuchadas. Nos parece que la muestra es una oportunidad para que otras mujeres dentro y fuera del INBA también levanten la voz, así como para que se fortalezca la solidaridad hacia ellas dentro y fuera de sus lugares de trabajo: es fundamental que quienes ejercen el poder a través de la violencia sexual sepan que sus compañeras de trabajo no están solas.
Ana Francis López Bayghen, Ana Serrano, Angélica Abelleyra, Aurora Montaño Barbosa, Claudia Espinosa Ramos, Cynthia Granados Posada, Elizabeth Ross, Fru Trejo, Gelen Jeleton, Janice Alba, Julia Antivilo, Karen Cordero, Larisa Escobedo, Laura Valencia Lozada, Leticia Pedrajo, Liz Misterio, Lucero González, Magali Lara, María Eugenia Chellet, Martha Toriz, Mirna Roldán, Mónica Mayer, Pilar García, Rian Lozano, Rosa Borrás, Rotmi Enciso y Satya Vinaver.
Al primer concurso de cartel y ensayo “Por el derecho a decidir”
BASES:
1.- Podrán participar todas las personas sin importar su edad, sexo, ubicación geográfica ni nacionalidad, interesadxs en la promoción del derecho al aborto en México.
2.- Todas las obras deberán presentarse en idioma Español (Castellano).
3.- Las obras deberán presentar argumentos, testimonios, imágenes y reflexiones a favor de la interrupción legal del embarazo. Bajo ninguna circunstancia se recibirán obras en contra del derecho al aborto o que promuevan tabús y estereotipos en torno al mismo.
4.- Las obras deberán promover una opinión favorable sobre el derecho al aborto
5.- Se privilegiarán los materiales novedosos, frescos, y con humor sobre la temática del aborto.
6.- Las obras deberán ser originales. (Autoría propia) e inéditas (no haber sido publicadas en otros medios con anterioridad).
7.- Las obras podrán abordar estadísticas, información sobre la legislación vigente en los diferentes estados de la República Mexicana, haciendo énfasis en las diferentes causales de aborto principalmente por violación, imprudencial o accidental. También se aceptan propuestas por las siguientes causales: grave daño a la salud, peligro de muerte, inviabilidad del producto, causas económicas, voluntad de la mujer hasta las 12 semanas.
8.- Es de interés también ensayos u obras sobre el tema de la relación entre los hombres y el aborto (estrategias de solidaridad, tabús, motivos para involucrarse).
9.- Se elegirá una obra ganadora por cada categoría, la cual se hará acreedora a $1,000.00 pesos mexicanos y materiales de la Ddeser (playeras, libros, postales).
10.- Se hará una selección de las obras recibidas que no resulten ganadoras para ser Publicadas en Hysteria! Revista junto con las obras ganadoras, bajo licencia Creative Commons (by-nc-nd). El autor de las obras conservará todos los derechos sobre las mismas.
11.- Las obras ganadoras serán difundidas dentro de las campañas de DDESER Jóvenes Querétaro y de Hysteria! Revista relativas al “28 de septiembre, día internacional por el derecho al aborto”
En este hermoso número 14, “Fluidos”, encaramos la pulcritud y limpieza con que nos enseñaron a practicar nuestra vida diaria para llenarnos un poco de esos líquidos ponzoños que expele nuestro cuerpo todo el tiempo. Ya sea en sentido literal como metafórico, presentamos diversas manifestaciones que experimentan con los fluidos o “el fluir” como forma de transitar entre identidades, escapando de los mandatos sociales y las lógicas binarias de la identidad.
La artista Melanie Bonajo realizó la serie fotográfica “Pee on Presidents” entre los años 1998 y 2013, en la que nos deja echar un vistazo a algunos momentos de intimidad compartida con sus amigas a quienes retrató orinando en espacios públicos. Los cuerpos aparecen reclamando territorios mediante el uso de sus fluidos, en un gesto de libertad que rompe con los esquemas de representación de la corporalidad femenina, al descubrir con naturalidad la belleza y la cotidianidad de un acto considerado tabú bajo los estándares sociales de la abyección y el decoro.
Para su banda ZaZaZoZo, Melanie junto con Joseph Marzolla reunió todas las imágenes que componen esta colección y realizaron un videoclip para la canción que lleva el mismo nombre que la serie fotográfica.